¿Hipotecar mi casa ya pagada es posible?
Hipotecar mi casa es una frase que a nadie le gusta plantearse. Sin embargo, puede darse más de una situación en que la opción de la hipoteca sea la solución que se tiene más a mano.
En todo caso, no siempre son motivos negativos los que pueden llevar a tomar la decisión de hipotecar una casa ya pagada. Puede que se necesite el dinero para emprender un proyecto en el que confiamos o queramos reparar o dar un aire nuevo a nuestro hogar. Cierto que en ocasiones los motivos son más penosos, como una deuda acumulada que parece no tener salida.
Sea como sea, la decisión ha de ser muy meditada y sopesando todos los posibles riesgos más la capacidad de asumir el compromiso.
En este artículo te contamos en qué consiste, cuáles son las condiciones y el proceso para solicitar la hipoteca y respondemos a las cuestiones más relevantes sobre este tema.
Recuerda que en nuestro blog encontrarás respuesta a muchos temas de actualidad que pueden ayudarte a resolver tus dudas.
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Equipo Editorial de WorldRemit
• Tiempo de lectura: 7 minutos • Al día
¿Qué significa hipotecar tu casa?
Hipotecar mi casa. Esa es la primera opción que te viene a la cabeza cuando planeas comprar o construir una vivienda. La inmensa mayoría de la gente hace uso de esta solución financiera para poder ser dueños de una propiedad.
A la pregunta de qué significa hipotecar tu casa, la respuesta más obvia es que una hipoteca es un crédito que concede un banco o entidad financiera para la adquisición o construcción de una vivienda y que se devuelve a través de cuotas mensuales hasta amortizar el capital prestado más los intereses pactados en el contrato del crédito.
Sin embargo, en ocasiones puedes pensar en hipotecar una casa ya pagada. Aunque parezca lo mismo no lo es. Te lo contamos en el siguiente apartado.
¿Y rehipotecar una vivienda?
Rehipotecar una vivienda es, como bien dice la palabra, volver a hipotecar. Si eres dueño de una vivienda seguramente la has adquirido a través de una hipoteca. Dicho de otro modo, cuando decidiste comprarla, solicitaste un crédito hipotecario. Esta es la primera hipoteca.
“Hipotecar mi casa ya pagada” es una decisión que puedes valorar cuando necesitas liquidez y no ves otra forma de conseguirla. Esta acción es una rehipoteca y sus condiciones son distintas de las del préstamo hipotecario con la que pudiste comprarla. En este caso no se trata de una hipoteca como tal, sino de un préstamo del que responde la propiedad, es decir, la vivienda queda en aval del crédito y sus intereses. En caso de no cumplir el pago de los plazos, el acreedor, normalmente una entidad bancaria, inicia el proceso para quedarse con el bien hipotecado.
Hipotecar una casa ya pagada: ¿cuáles pueden ser los motivos?
Las razones por las que pedir hipoteca sobre casa pagada son diversas, aunque todas ellas coinciden en la necesidad de disponer de dinero de forma más o menos urgente. Estos son los motivos más comunes:
Reunificar deudas pendientes. Con el dinero prestado se saldan débitos pendientes para afrontar un único pago mensual.
Reformar o ampliar la vivienda. Es una solución para poder realizar reparaciones o cambios necesarios en la casa y no se tiene el dinero para ello.
Comprar otra vivienda. Hipotecar una casa ya pagada para comprar otra es una opción si se necesita más dinero que el concedido por el banco para esta segunda adquisición.
Utilizar el dinero del crédito para un uso ajeno a la vivienda. Por ejemplo, montar un negocio.
¿Cómo puedo pedir una hipoteca sobre una casa ya pagada?
Si la frase “hipotecar mi casa para pagar deudas” es la respuesta que ves para solventar el apuro financiero puedes hacerlo, aunque antes de dar el paso es recomendable sopesar muy bien todos los pros y los contras.
En cualquier caso, antes de referirte los riesgos que implica hipotecar una casa ya pagada, explicamos cómo puede solicitarse. Estos son lo pasos a dar:
Dirígete al Registro de la Propiedad y pide una nota simple conforme eres el titular de la vivienda y ésta está libre de cargas.
Pide condiciones sobre el préstamo hipotecario. Puedes consultar varias entidades, especificando cuál es el objetivo del crédito.
Concierta la tasación de la vivienda. Este dato es imprescindible para que el banco concrete el importe a conceder.
Reúne toda la documentación necesaria que requiera el banco para estudiar tu petición.
Si la solicitud llega a buen término, el último paso es la firma del crédito ante notario.
Riesgos de hipotecar una casa ya pagada
Pedir hipoteca sobre casa ya pagada es una decisión difícil debido al riesgo de perder la vivienda si no puedes hacer frente a los pagos del crédito. Antes de dar el paso valora otras posibles fuentes de financiación que eviten poner en riesgo la propiedad.
Estos son los principales riesgos que tendrás que afrontar:
El aspecto más importante es que la propia vivienda es el aval, con lo que ello implica. Antes de firmar, asegúrate de que podrás afrontar los pagos durante todos los años de vigencia de la hipoteca.
Las condiciones del contrato no son las mismas que en una hipoteca para comprar una vivienda. En este caso, las tasas de interés son más altas.
Hipotecar mi casa ya pagada: otras preguntas frecuentes
Si te preguntabas: ¿puedo hipotecar mi casa ya pagada?”, ahora ya sabes que sí. Para que no te quedes con ninguna duda, respondemos a las preguntas más frecuentes sobre este asunto.
¿Se puede conseguir liquidez hipotecando una casa ya pagada?
En principio, sí es posible conseguir liquidez al pedir hipoteca sobre una casa ya pagada. Puede resultar una solución para organizar tus finanzas, aunque para que salga bien deberás ser muy disciplinado en el cumplimiento de los plazos.
Si estás dispuesto a hacerlo, el mejor modo es realizar un estudio de la viabilidad del préstamo teniendo en cuenta las condiciones del banco para concederlo y previendo un desembolso inicial para los costes y las comisiones del trámite de apertura del crédito.
¿Cuándo no se puede hipotecar un inmueble?
Existen tres requisitos indispensables para poder utilizar la vivienda como garantía para un préstamo:
La vivienda ha de estar pagada. Si se solicitó un crédito hipotecario para comprarla, dicha hipoteca ha de estar completamente saldada.
La casa ha de estar libre de cualquier carga. Sobre ella no puede pesar ningún embargo, deuda o cláusula resolutoria.
La casa ha de estar a nombre de quien pretende solicitar un préstamo.
Si se dan estas tres circunstancias solo quedará que el banco acepte la propiedad como garantía de pago.
¿Cuánto te da el banco por una hipoteca?
El importe de la hipoteca que se concede sobre una vivienda ya pagada suele estar entre el 50 y el 60% del valor de la misma. Se trata de un porcentaje menor que el concedido en un préstamo hipotecario para comprar una vivienda, que habitualmente es de un 80%.
Por ello es importante conocer de antemano el valor de la casa a través de una tasación. Así puedes valorar el importe qué el banco considerará concederte y valorar si es suficiente para solucionar la razón por la que quieres hipotecar tu casa.
Antes de decidirte, infórmate de la viabilidad y las condiciones del préstamo en distintas entidades para poder comparar entre varias y escoger la que presente las condiciones más asequibles.
¿Cómo saber si te puedes permitir una hipoteca?
A la hora de solicitar una hipoteca debes contar con un monto suficiente para pagar los gastos necesarios que conlleva todo el proceso como la tasación de la casa para poder conocer su valor y, en consecuencia, el importe al que puede llegar el préstamo, los gastos de notaría y, en muchos casos, la comisión de apertura del crédito.
La nota simple conforme la casa está a tu nombre y libre de cargas más la tasación suele costar entre 300 y 500 €. Por su parte, la comisión de apertura oscila entre el 0,5 y el 1% del valor de la vivienda.
Es fundamental realizar una planificación de los pagos pendientes, mantenerla a rajatabla y saber que podrás afrontar el coste mensual de la hipoteca sin caer en demoras ni impagos. Se trata de poder solucionar el apuro financiero no de agravar el problema.
¿Cuánto tiempo se tarda en que te concedan una hipoteca?
No existe un plazo establecido que determine la concesión de una hipoteca. Es necesario distinguir entre la concesión de la hipoteca y el acto de la firma que le da validez.
La concesión de la hipoteca por parte de la entidad bancaria suele requerir entre 10 a 15 días, tiempo en que el banco valora tu perfil financiero y las condiciones del crédito.
En este punto es importante tener en cuenta que cuanto antes entregues toda la documentación que se requiera, como la tasación del inmueble y la nota simple antes tendrá el banco la resolución acerca de tu solicitud.
Una vez aprobada la concesión, hay que concertar cita con la notaría para ir a firmar. Este trámite puede demorarse de un mes hasta tres meses desde la resolución del banco.
El total del tiempo desde que decides solicitar la hipoteca hasta el día en que se firma puede ser de 40 días en el mejor de los casos a más de cien, aunque esto último no es lo habitual.
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